Costumbres, tradición, gastronomía, trabajos rurales, vida vaqueira, saber popular
 

 

Pues yo diría como Shane Parrish:

"... no resulta fácil recordar de dónde sale cada aprendizaje. Gran parte de ello ha quedado engranado en mi subconsciente. Pero cabe asumir que todas las enseñanzas útiles que contiene este libro son idea de otra persona y que mi principal aportación es componer para el mundo el mosaico de lo que he aprendido de quienes me antecedieron"
(Pensar con claridad. Ediciones Destino)

de próxima aparición en librerías.

Informantes de los pueblos
(1)

Extracto de la nota de agradecimientos
en el prólogo del
Diccionario etimológico de Toponimia asturiana
(páginas 17-27)
Ediciones KRK, Oviedo, 2007.
Xulio Concepción Suárez.

Desde las brañas y brañeros más occidentales: Ibias, Cangas del Narcea, Allande, Valdés, Tinéu...

Por comenzar por los más occidentales, por Ibias, he de citar a María Arango, Carmen y María Luisa, en Luiña; Manuel, en Rellán; Antonio Valle, en Andéu; Segundo, en Valdeboís. En Boal, Santiago Martínez, José Soto Magadán, en Doiras; Benigno, en Brañadesella; José y Benigna, en Fontescabadas. En Villayón: Vidal, en El Couz; Jesús, en Partseiru; Fidel y Javier Fernández, en Barandón; Jesús, en Oneta.

En Degaña: Enrique González, en Sisterna. En Eilao, Aurora Barcia; Benxamín García, en Sarzol; Julio Fernández, en Eirías; Inés y Benxamín, en Estela; Ermetis y José Luis Rico: en Xío; Manuel Méndez: en El Pato. Juaquín, en Rebotsar. Luis, en Vilabriye, y otros pueblos de Pezós.

En Allande: Álvaro y América, en El Rebotso y La Braña Campel; Ángel Rodríguez Álvarez, en Vitsafrontú; Enrique, Erene, Paulino, Hilda, en Iboyo. Rubén, en Valledor y altos del Saladín, La Sietsa, Candal y Pozu las Muyeres Muertas. Manuel López Queipo, Manolo, César, Benxamín y David, en La Braña de Is. José Méndez, Amador, Benjamín, Manuel, en Vitsalaín. Simón, en Berducedo. Luis Miguel, en La Puela. Alvarón, en Villarpedre.

En Cangas del Narcea: Cosme Menéndez y Francisco Rodríguez, en Tseitariegos; Amador, en Las Tiendas. Guillermo, en Cibea; Francisco Rodríguez, en Sorrodiles; Manuel, Luis, Celia, Tomás Begega y Yolanda: en Brañas d’Arriba; José Ángel, en Naviegu; Ramiro: en Las Fuentes del Narcea; Manolo y Manuel Murias: en Braña Narcea; Amalia González, Avelino García, José María García, Ramiro García y Sonjita Menéndez: en Xarceley. Antonio Menéndez, Francisco López y Ángel Berdasco, en Xenestoso. Diego, en Trascastro.

En El Cabanal y altos del Acebu, Alvarina de García, Josefa Charro, José Antonio Chano, Ernesto Bernaldo, y Encarna, Ana y José García. Francisco y Manuela, de Casa Pablo, en Chanos de Sierra y Parada la Viecha; Telvina: en Fuentes de las Montañas. Iván y Benigno, en Santarbás. Manolo, en Sonande y brañas de Tsebornal. Segundo de Vidal, en el valle de Tesitariegos y altos de Canietsas, Arbas. Adoptino, Rufino Jesús: en los altos de Biescas y L'Acebo. Pilar, en San Fliz (Las Montañas). José, en Las Defradas, y José, en Fontes (Las Montañas).

En Tinéu, María y José Bueno, Fina y Emilín: en Coucetsín; Encarna y Antonio (El Fondal); Ramón: en Zardaín; Jesús, en Muñalén; Jesús Gómez, en Navelgas. Manuel García, Aurora Gayo, Juan, en La Braña las Tabiernas y altos de La Casa’l Puerto. María Pilar, Jesús, Francisco Garrido Verdasco y Carlos, de Casa’l Corralo: en El Bidural (Navia).

En Valdés: Balbino, en La Espina y brañas de Salas. Ramón, en La Degollada (Valdés). Elvira, Amador, Rocío, Ana, en las brañas de Aristébano. Luis, en Mudreiros".

por Xulio Concepción Suárez


Con la hospitalidad compartida
de Alvarón en Villarpedre:
toda la amabilidad y sabiduría popular
contenida en aquellos altos allandeses
.

"Nuestro medio rural morirá si no sabemos transmitir a los que vienen su importancia y su cuidado. Y no sólo nuestro medio rural, sino toda la biodiversidad que vive en él, nuestros pueblos, nuestras costumbres, nuestras historias. Nuestra cultura, así, sin el adjetivo rural, porque es cultura y es de todos.

Debemos aprender a mirar y transmitir. Preguntar a nuestras abuelas, a nuestras madres. Preguntar, contar, escuchar, cuestionarse una y otra vez. Mirar más allá. Mancharse las manos de tierra. Dejar que los que vienen, los niños y las niñas del futuro, se manchen las manos también. Se empapen de tierra y animales, de historias de sus mayores, darles la mano, que quieran visitar y habitar una casa llena de raíces y patrimonio que aún está por construirse, Crear un vínculo y cuidarlo"  (María Sánchez)