Costumbres, tradición, gastronomía, trabajos rurales, vida vaqueira, saber popular
 


Los crótalos

Los instrumentos nusicales
asturianos:
pequeño diccionario

(en sus comienzos...)

 

bígaru, el

  • La palabra viene, tal vez, del celta *bekkos (pico), más tarde, cuerno marino, también, caracol....

  • El bígaro, una vez vaciado y seco, se usó mucho en los pueblos como bocina para comunicarse los ganaderos por los altos de los puertos, y con los poblados mismos. Así se fueron desarrollando muchos sonidos según quien llamara, de forma que cada familia conocía el familiar que estaba lanzando algún mensaje a distancia. El mismo sistema lo usaban los ganaderos para llamar a sus ganados que, su vez, bien distinguían la voz del dueño y acudían a la cabaña. Por esto, los bígaros dieron lugar a cantidad de notas musicales y habilidades pastoriles según el tamaño, la forma, el peso, la longitud del cuerno...

 
botella anís, la
  • La improvisación, la creatividad, la reutilización de los recursos al alcance de la mano, aparece en la memoria de cualquier mayor de hoy, a poco que se les pregunte por los instrumentos para hacer música en la fiesta del pueblu, en las mayadas de las cabañas los domingos y días de fiesta.

  • Uno muy frecuente era la botella de anís corriente biselada: la que tenía unos cuadradillos oblicuos casi todo alrededor. Una vez ya sin anís, la botella, muy resistente, tampoco se tiraba: se guardaba para muchas funciones, entre otras para utilizarla como acompañamiento de los cantos y las rondas, las danzas, los días de baile en el pueblu o en el puerto ante las cabañas. A modo de palillo se buscaba un tenedor, una cuchara, un palo de madera dura, un fierro delgado... Y era suficiente para empezar el baile.

 
campanas, las
  • Los campanarios tenían función especial en los pueblos hasta hace unas dácadas: por eso las iglesias están siempre estratégicamente situadas en lugares vistosos, con unas condiciones acústicas que permitieran llegar sus toques a todo el vecindario y alrededores.

  • El sacristán, el cura, tocaba de forma distinta para cada comunicado a los vecinos: para la misa de los domingos, para la misa diaria, para avisar de una muerte, para los funerales, para los bautizos, para las bodas, para la fiesta'l pueblu, para el rosariu de la tarde, para anunciar fuego, para llamar a la reunión (esquisa, conceyu, estaferia), para ahuyentar las tormentas...

  • Todo un lenguaje de las campanas, que entendían el campaneru y los vecinos: hasta se sabía en el toque a difuntu si había muerto una muyer (dos repiques) o un home (tres repiques).

  • Especial importancia tenían las campanas en los pequeños monasterios de los altos al paso de una región o monte a otro. Las capillas tenían una campana que sonaba con frecuencia en días de niebla para orientar al caminante: de esta forma, tras el sonido, llegaba de nuevo al camino principal..

 
carraca, la
  • Palabra derivada, tal vez, de la carraca vaquera: el conjunto de utensilios y víveres que los vaqueros llevaban a las caserías o al puerto por el verano; lo transportaban en un carro que metía ruido, chirriaba; en una carreña; o a lomo del animal, siempre con algún movimiento de los cacharros que iban dentro.

  • Se construye con una tabla enteriza a la que se hace el vacío a modo de una U; se hace una hendidura en la parte posterior para introducir la lengüeta que vibra; se taladra un agujero trasversal en la boca abierta para la empuñadura que gira; se diseña luego una rueda estrellada de cinco aspas para que, al girar con las vueltas, vaya saltando sobre la lengüeta y haga el ruido. Se usaba en las fiestas del aguinaldo en Navidad, en la Cuaresma, por Pascua...

crótalos, los
  • Palabra derivada del latín crotalum, a su vez del griego krótalon (especie de castañuelas) .

  • Son, por tanto, castañuelas más anchas y alargadas, con mayor concavidad para el aire entre las dos, de forma que producen un sonido más hueco, que resuena más en el espacio, sobre todo si es cerrado.

fierros, los
triángulo, el
  • Consistían en un par de hierros: un triángulo y una vara más o menos corta, que se hacían sonar alternativamente para marcar el ritmo de las canciones orales. Se colgaba de un cordel que sostenía una mano, al tiempo que se daban los toques con la otra.
 
pandereta, la
  • Un derivado femenino del latín pandorium, a su vez del griego pandúrion (instrumento musical de cuerdas y luego con otras formas también).

  • Se construye con bastidor y piel de oveya, una vez curtida, pulida y seca. Queda en la copla:.

    • "Esti panderu que toca,
      ta fechu de piel d'oveya:
      ayer berraba nel monte;
      hoy toca la pandereta"
 
panderu, el
  • Viene la voz citada pandorium, con forma ya redonda y más sólida que el panderu.

  • Se construye con cuatro tablas formando un bastidor, al que se sujetan unas cuerdas de tripa; se cubren con piel de oveya, muy fina y tensa cosida a los bordes del bastidor. Se toca con las dos manos, a cusyo son se canta y baila.

 
rabel, el
  • Palabra que procede del árabe rabâb (especie de violín, vihuela).

  • Consiste en un arco de tres cuerdas de fibras animales, que produce un sonido muy agudo. Era propio de los pastores.

 
turullu, el
  • Voz dudosa, tal vez simplemente onomatopéyica, por el sonido que produce; o de raíz prerromana, *twr- ('altura, montículo'), porque para hacerla sonar se colocaba el vecino en un pequeño alto del pueblo.

  • Tenía varias formas, según los usos: en unos casos era una especie de flauta de niños, hecha con un palo verde; en otros, un cuerno o un bígaro de tamaños distintos. De ahí, los sonidos diferentes.

 

xiblata, la

  • Viene de la palabra xiblar (lat. sibilare, silbar).

  • Es un tipo de flauta hecha con la corteza de algunos árboles más dóciles, y cuando las puyas están más verdes en primavera: castañar, ablanar, xabú, salgueru, salguera...

  • Cortamos un trozo de la vara (como 20, 30 cm...), frotamos suavemente la corteza con otro palo, de forma que no se rompa; es decir, amugamos la vara. Cuando ya está suelta, sacamos el palo limpio de dentro, y queda el tubo de la corteza. Taponamos la parte inferior, hacemos un tajo oblicuo para la boca, taponando una parte para que entre graduado el aire; con la punta de la navaja, rompemos algunos aguejros por el medio para los dedos. Y empezamos a probar sonidos.

 

xiblatín, el

  • Es un tipo de xiblata más pequeña, que hacían los güelos o los padres para los guajes, mientras estaban en el campo; de esta forma, no se aburrían, al tiempo que se aficionaban por la música del pueblu con sus primeros pinitos por el monte, lejos de la escuela.
 
xibletu, el
  • Era un silbato más corto que se hacía al modo de la xiblata y el xiblatín, pero para producir un sonido único, al no tener varios agujeros.
 

zamploña, la

  • Viene de la palabra latina *sumponia, symphonía, a su vez del griego simfonía (concierto), y luego instrumento musical con que se tocaba la sinfonía.

  • Se fabrica con una caña verde de alcacer (la caña del cereal cebada). Se frota entre las manos, al tiempo que se canta una canción para que suene bien:.

  • Cuando se hace con una puya de castañar (en primavera), se frota hasta que suelte la corteza del palo; se saca el interior, se tapona el final, se tapa la parte superior con un trozo de la misma vara que deje un rebaje para introducir el aire, se talla una pequeña muezca para que salga con fuerza, y a silbar... como los guajes de antes.
venu, el
  • Es otro de los instrumentos rurales improvisado para animar un baile ocasional: como ya estaba hecho, no había más que comenzar a usarlo. Era el mismo vano usado para mover el grano, lanzarlo con arte al viento y dejarlo limpio, sin pajas.

  • El venu es, por tanto, una especie de criba con aro de madera, fondo de cuero sin agujeros, que servía perfectamente de tambor para repicar con los dedos o las palmasd e las manos. Al son del venu y de las coplas recitadas por la panderetera y el coro, quedaba animada la fiesta en el pueblu o en las mayadas de las cabana.

 
  (sigue la páxina en construcción...)  
 

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