Costumbres, tradición, gastronomía, trabajos rurales, vida vaqueira, saber popular

Al olmo seco

El olmo seco: cuadro de Laura D. Jaular .
Cuadro de Laura D. Jaular

Antonio Machado

Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido..

¡El olmo centenario en la colina
que lame el Duero! Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.

No será, cual los álamos cantores
que guardan el camino y la ribera,
habitado de pardos ruiseñores.

Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él, y en sus entrañas
urden sus telas grises las arañas.

Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;
antes que rojo en el hogar, mañana,
ardas en alguna mísera caseta,
al borde de un camino;
antes que te descuaje un torbellino
y tronche el soplo de las sierras blancas;
antes que el río hasta la mar te empuje
por valles y barrancas,
olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.

El olmo seco: cuadro de Laura Noval
Cuadro de Laura Noval

Caminante...

Caminante son tus huellas
el camino, y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar. 

Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
has de volver a pisar. 

Caminante, no hay camino,
sino estelas en el mar .

El olmo seco: cuadro de Javier
Cuadro de Javier

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