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Alba Poética
Celso Peyroux inicia la publicación de su obra poética en este libro. No podía faltar en una vida tan plural como es la del autor, un compartimento dedicado a la reflexión íntima que, en este caso, adopta una forma lírica. nada de lo que sucede alrededor del poeta le es ajeno. Por el contrario, el poeta asume los diversos acontecimientos y los reconstruye con un talante muy peculiar, con una interpretación misteriosa que alcanza una gran eficacia comunicativa.
El amor y la muerte, los dos ejes sobre los que gira nuestro mundo, son las bases de la poética de Celso Peyroux que, en este libro, se nos muestra como una voz lírica madura y muy interesante. El buscador de hechos, el coleccionista de sensaciones, se detiene unos momentos al borde del camino -acaso cinco o diez minutos cada día- y piensa en la ruta que ha recorrido y en las leguas que aún le quedan- La vida -opina- es una sucesión de contrastes, una calle jalonada por sonrisas y lágrimas, por oro y por barro.
Esta diversidad es la fuente de inspiración del poeta que, en algunas ocasiones, adopta un estilo intimista, pleno de sensaciones amorosas, comprendiendo la realidad vital con una visión optimista. En otras ocasiones, es la lucha feroz del hombre contra la tierra, contra el infierno de los otros los que inspiran a Celso Peyroux. En este caso, lo que era mansedumbre se torna grito, lo que era deleite se transforma en denuncia. El amor y el dolor hace que el poeta sea profundamente humano y que renuncie a funambulismos mentales o cursilerías literarias. El amor y el dolor clavan aún más al poeta en la entra de su tierra y de su gente.
Que nadie busque pues, en este libro concesiones a la retórica o ejercicios de preciosismo. Celso Peyroux encuentra su propia voz cuando logra desprenderse de los poetas que admira. No se trata de buscar cercanas fuentes de inspiración sino de alinear a nuestro autor en la mejor tradición poética del castellano.
Un nuevo libro de poemas, pues, que viene a enriquecer el panorama asturiano tan necesario de estímulos y de realidades.
Faustino F. Alvarez
Periodista
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